Hace 81 años atrás, específicamente en el año 1935, abría por primera vez sus puertas un teatro que esperaba ser un foco y epicentro cultural de la ciudad de Valdivia. Su nombre, Teatro Cervantes, un espacio cuya capacidad alcanzaba para albergar a 1140 espectadores, convirtiéndolo en un lugar único e inigualable para la ciudad.
Este proyecto nació gracias a los esfuerzos de inmigrantes y empresarios que buscaban darle vida a la ciudad mediante cultura pura. Buscaban un espacio de música, teatro y cine que llevara a la ciudadanía a otra dimensión, quedando en la historia de Valdivia y además equilibrando a la ciudad con las otras a lo largo de Chile que ya contaban con estos espacios.
El teatro comenzaba a hacer historia, contaba con gran asistencia de públicos y cada vez se volvía más atrayente y conocido, pero todo cambió producto de la crisis económica de los 70 y la masificación de la televisión mediante la globalización.
Las consecuencias de los hechos antes mencionados, acarrearon al cierre definitivo del histórico teatro, ya que con la televisión se volvió más atrayente quedarse en la comodidad del hogar que visitarlo, reduciéndose de sobre manera las funciones que se impartían a la comunidad. Luego del cierre en el año 2007, el lugar quedó abandonado, hecho que quienes conocen Valdivia pueden constatar al ver la precariedad en la que se encuentra actualmente.
La última iniciativa que se conoció contaba con un presupuesto de 4 mil 600 millones de pesos de inversión destinados a la intervención estructural y acondicionando el recinto con una sala de espectáculos, estudios de grabación, sala de ensayos, camarines, etc.
Muchas han sido las propuestas para su remodelación, de hecho comenzaron un año después de su cierre definitivo, pero actualmente, en el año 2017 aún no hay ningún cambio visible, y su descuido sigue siendo lamentable.

Descripción de las tres dimensiones que componen el paisaje sonoro
La geofónica que se refiere a los sonidos producidos por los elementos no biológicos naturales del paisaje, es percibida en el audio a través del sonido del viento que circula por el lugar, dando la sensación de que el espacio grabado no se encuentra entre grandes edificios, sino que está cerca de árboles.
La dimensión biofónica, compuesta por los sonidos producidos por las vocalizaciones animales, se percibe en el paisaje sonoro a través del canto de los pájaros, por lo que se deduce, como en la dimensión anterior, que el entorno del lugar elegido posee características relacionadas con la naturaleza.
La antropofónica, corresponde al conjunto de sonidos producidos por aparatos técnicos, y en el paisaje sonoro realizado el ruido de los motores de autos y micros son los que más se escuchan y sobresalen, aportando sensaciones y ruidos cotidianos.
Valoración del ejercicio
El trabajo realizado nos aporta sensaciones y percepciones de un lugar, en este caso el Teatro Cervantes, y gracias a éste paisaje sonoro se puede llegar a la conclusión que cerca del teatro se pueden encontrar árboles, pájaros, y además por el ruido de motes se logra deducir que la construcción se ubica dentro de una ciudad.
El ejercicio realizado ayuda a valorar la importancia de los sonidos que nos rodean, y cómo éstos nos ayudan y entregan señales para hacernos una idea e impresión del lugar en que nos encontramos.

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